Hemos llegado ante la Capilla Mayor, dividida en dos partes,
alta y baja, por un graderío de diez escalones. En la parte alta se sitúa el
Retablo Mayor que, contrariamente a lo habitual en la zona, no es poligonal,
sino recto, adaptándose al fondo del presbiterio. Su estilo es
plateresco, estando formado por banco, cuatro cuerpos de cinco calles y ático.
Las calles se separan mediante columnas cilíndricas o abalaustradas, sencillas
o dobles, todas ellas muy decoradas. Queda así un amplio espacio muy
compartimentado que permite, al estilo del altar mayor de la Catedral de
Sevilla, mostrar numerosas escenas diferentes.
Retablo Mayor. |